Las madres del instituto de educación Secundaria García Berlanga están en pie de guerra. Lo están desde que el nuevo trazado de la línea interurbana C53, que ahora conecta El Campello con el Hospital de Sant Joan por la avenida Miguel Hernández, suprimió paradas ubicadas en el casco urbano de Sant Joan d'Alacant y dejó una zona del municipio «aislada», según la denuncia vecinal.

Samantha Doménech tiene un hijo de 13 años que ha empezado este curso primero de la ESO en el García Berlanga. Ella siempre ha usado el transporte público para moverse por el municipio porque no tiene vehículo privado, ni carnet de conducir. Samantha asegura quedarse preocupada cada mañana cuando su hijo sale de casa para ir a clase. «En el autobús hubiera llegado en cinco minutos, pero ahora, queda con algún amigo a las 7.30 de la mañana para ir caminando. Y todavía no hace frío, pero cuando llegue el invierno o llueva, tendrá que ir a pie, y a veces, hace el camino sólo». Samantha no se rendirá fácilmente, tiene el apoyo de otras madres y padres de alumnos del García Berlanga, y no son los únicos. Desde hace días está recogiendo firmas entre los vecinos de Sant Joan d'Alacant para que el C53 recupere el recorrido anterior a la remodelación del transporte interurbano de l'Alacantí. El pasado 27 de septiembre presentó por registro en el Ayuntamiento 115 firmas de vecinos apoyando su propuesta, y ésto es sólo el principio. Samantha cuenta con la ayuda de Silvia Cayetano, ella es madre de una niña de 13 años, que cursa segundo de la ESO. Silvia tampoco tiene coche y su hija acude cada día al instituto caminando, «el recorrido son unos veinte minutos, tampoco es que sea la super distancia, pero estamos hablando de una zona muy solitaria». Silvia asegura sentir «temor» cada vez que su hija se marcha al instituto, «aunque siempre va con un grupo de amigas. Y, además, están en una edad en la que no quieren que los padres les acompañemos, porque les da vergüenza, se sienten mayores, pero tienen 13 años».

La reivindicación de estas madres no sólo se centra en los estudiantes del García Berlanga. Ellas denuncian que ahora hay una zona del pueblo, la de la avenida Ansaldo, que está aislada. Son conscientes de que las paradas suprimidas «no tenían un número elevadísimo de viajeros, pero ofrecían un servicio de transporte público muy necesario, ahora el único autobús que circula por el pueblo es el 23, y no cubre esta zona». Las paradas que reclaman son la del polideportivo municipal de Sant Joan, la residencia geriátrica Cap Blau, la rotonda del IES Berlanga, la urbanización El Salt, las de la Rambla, la de los Hierros y la de la Urbanización Niza.

Reunión con la Conselleria

La edil de Movilidad, Eva Delgado, (PSOE), recordó ayer que las competencias del transporte interurbano son de la Conselleria. En ese sentido, la edil anunció que presentará estas firmas en la reunión que el Ayuntamiento ha solicitado a la Conselleria de Transportes para «tratar aspectos de mejora aportados por los usuarios, tras la remodelación del transporte interurbano de L'Alacantí, en cuanto a frecuencia y parada.». Delgado destacó también que las paradas canceladas «registraban muy pocos usuarios».