Al llegar a San Vicente del Raspieg desde Alicante, el barrio Santa Isabel da la bienvenida al municipio. Esta zona sustituyó hace doce años el término «colonia» por otro más aséptico como es el de «barrio». Gracias a la lucha vecinal, se han conseguido alcanzar grandes conquistas a lo largo del tiempo, como la apertura de un Centro Social o de un ambulatorio.
Sin embargo, los vecinos continúan reclamando inversiones en Santa Isabel para mejorar su calidad de vida y acabar con la sensación de «abandono». La Asociación de Vecinos Zoila Romero Checa ha elaborado un «Plan de choque integral a largo plazo» en el que se recogen una serie de peticiones relacionadas con el empleo, la educación, la vivienda o la sanidad.
Una de las grandes preocupaciones de quienes viven en el barrio Santa Isabel es el alto índice de desempleo, que alcanza un 83%. Una cifra que ha supuesto que varias personas dependan de la ayuda de Asuntos Sociales y Cáritas. Por ello, la organización vecinal ha solicitado al Ayuntamiento de San Vicente que se lleven a cabo cursos de formación remunerados que faciliten la incorporación al mundo laboral y en los que se combine la cualificación profesional con la adquisición de hábitos sociales y de trabajo.
Pediatra
Otra de las demandas de los residentes del barrio Santa Isabel es la ampliación del servicio de pediatría en el Centro de Salud, al que también acuden los vecinos de Haygón y de El Sagrat. En concreto, los ciudadanos solicitan que el pediatra, que actualmente solo está disponible en horario de mañana, también pase consulta por las tardes.
En cuanto al ámbito de la vivienda, la Asociación de Vecinos Zoila Romero Checa quiere acabar con el incremento de ocupaciones ilegales y para ello exige al Ayuntamiento que lleve a cabo un control más exhaustivo. Además, la organización ha solicitado al alcalde de San Vicente del Raspeig, Jesús Villar, que se ponga en marcha un parque público de viviendas sociales destinado a personas desahuciadas o en riesgo de exclusión social cuyo alquiler no supere el 30% de los ingresos familiares.
Los residentes de Santa Isabel también tienen el objetivo de conseguir «un barrio donde se pueda anda y pasear». Así, exigen que se recuperen los jardines, que se eliminen los postes eléctricos sin uso, que se asfalten las calles y que se supriman las barreras arquitectónicas y se rebajen las aceras para mejorar la accesibilidad.
Por otra parte, según los vecinos, las redes de agua y vertidos están obsoletas y «corresponden al modelo de necesidades de un barrio rural de los años 60», por lo que piden que se renueven los colectores y se lleve a cabo la instalación de nuevas infraestructuras de gas y fibra óptica.
