Una brigada de los Bomberos se acercó ayer hasta el paraje natural del Cabeçó d'Or, situado enBusot, para sofocar una pequeña hoguera que fue encendida por unos excursionistas. Una imprudencia que no llegó a tener consecuencias mayores gracias a la rápida actuación de los Bomberos y a la ausencia de viento.

La actuación de urgencia se produjo cerca de la 8.00 horas, cuando un senderista, al percatarse de la situación llamó a emergencias, que rápidamente se puso en contacto con la Policía Local y con los Bomberos.

Al llegar a la zona, cerca de la Casa del Polset, encontraron piquetas y señales de que habían acampado. El alcalde de Busot, Alejandro Morant, denunció públicamente este «acto de dejadez». «Es difícil saber quién ha sido porque no hay pistas», añadió.