Hasta el próximo sábado San Vicente del Raspeig va a poner en marcha un dispositivo de limpieza extraordinario tras las fiestas de Hogueras. La concejala de Urbanismo y Servicios Públicos, Mariló Jordá, explica que desde el mismo domingo de la Cremà se trabaja intensamente para devolver a la ciudad a la normalidad «de la manera más rápida posible».
Jordá explica que el servicio extraordinario supone que a lo largo de esta semana se realizará por las mañanas el servicio ordinario de limpieza y baldeo en todo el municipio, tarea que se reforzará por las tardes con más baldeos en aquellas calles en las que hayan estado plantadas las hogueras y barracas así como los racós.
«Esta semana estará trabajando casi toda la plantilla», explicaba ayer la concejal, que ha concretado que en el dispositivo global durante las fiestas y que se está efectuando esta semana suma más de 500 horas de limpieza extraordinarias en la ciudad.
Desde el Consistorio señalan que tras la cremà del domingo de los 22 monumentos, los dos oficiales y los 20 de los diez distritos, se realizó un despliegue de operarios de limpieza. El objetivo principal fue retirar los restos de las hogueras y el baldeo de los recintos. El domingo a las tres de la mañana se iniciaba la cremà de las últimas hogueras que fueron l'Entrà al Poble; Haygón, Sol y Luz, y Ancha de Castelar. Por su parte, el alcalde, Jesús Villar, destacaba la afluencia al municipio y la repercusión económica que ha tenido, especialmente en la hostelería.
