San Vicente prepara una campaña de concienciación ciudadana sobre la recogida de los restos de poda. Para ello, la edil de Infraestructuras, Mariló Jordá, explica que se van a enviar 4.300 cartas a los vecinos que viven en las urbanizaciones y en las partidas rurales para que depositen de manera correcta los restos de poda de sus chalés o campos.

Jordá considera que todos los vecinos han de colaborar para evitar la mala imagen, así como gastos añadidos al tener que hacer trabajos extraordinarios para recoger la poda esparcida junto a los contenedores. De vez en cuando, aparecen incluso palmeras y árboles troceados. El sobrecoste en la limpieza repercute en todos vecinos y es un factor muy importante a tener en cuenta.

En San Vicente se generan al año 1.200 toneladas de poda al año, una media de 6.250 kilogramos diarios. El Ayuntamiento tiene un servicio gratuito de recogida de estos restos vegetales, que en ocasiones se tiran de manera indebida.

Aunque las multas podrían llegar a los 200 euros, la concejalía de Urbanismo, Infraestructuras y Servicios Públicos ha diseñado esta campaña para concienciar a los sanvicenteros.