Un día ha tardado Ciudadanos en dar respuesta a las explosivas declaraciones del portavoz de su formación en Sant Joan d'Alacant, Ignacio Gisbert. El portavoz arremetió el jueves en una rueda de prensa convocada por la mañana contra la cúpula del partido tanto local como regional y afirmó que su formación «está podrida». A la vez que pedía la dimisión de los coordinadores provincial, Emigdio Tormo; regional, Emilio Argüeso; y del secretario de Organización, Francisco Hervías. Y todo ello a escasas horas de que arrancase la campaña electoral.

La decisión del Comité Ejecutivo de Ciudadanos no se ha hecho esperar y ayer por la tarde tomaron una determinación. En un comunicado la formación expresó que, en cumplimiento de sus estatutos, incoaba ayer mismo un expediente disciplinario al concejal del Ayuntamiento de Sant Joan d'Alacant, Ignacio Gisbert, en su condición de afiliado.

En dicho comunicado expresan que, según el reglamento interno de Ciudadanos, se inicia un plazo de diez días para realizar las alegaciones que la persona considere necesarios.

A la vez, el Comité Ejecutivo recalca que «tras la valoración de los hechos que constan en el expediente, el edil de Sant Joan ha sido suspendido cautelarmente de militancia».

Desde Ciudadanos destacaban que la formación hace especial hincapié «en la importancia de que todos sus cargos electos cumplan con la normativa del partido y respeten los valores éticos que se marcan en los estatutos del mismo».

El portavoz y concejal tuvo durante el día de ayer el móvil apagado por lo que fue imposible conocer su opinión. Un día antes reconoció que tras sus declaraciones esperaba su expulsión. Y advirtió que no dejaría su acta de concejal alegando que los ciudadanos le habían votado para representarles y que muchas personas del partido le han pedido que no se vaya.