Les festes de Sant Gregori se cerraron ayer con la celebración de la festividad del patrón de La Torre de les Maçanes. Por la mañana, pese a la intermitente lluvia, tuvo lugar el ritual del Pa Beneit, con nueve mujeres que portaron en sus cabezas los panes para su posterior bendición en la iglesia, repitiendo así el acto celebrado el domingo. La lluvia no deslució este ancestral acto, que se desarrolló con normalidad. En cambio, la procesión en honor a Sant Gregori que estaba prevista para ayer tarde sí que tuvo que suspenderse por la lluvia, así como la mascletà nocturna.