Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

San Vicente del Raspeig

Un edificio al borde del colapso

El fontanero no pudo acceder al bloque 67 de Santa Isabel al pedirlo por escrito el propietario

La edil de Urbanismo visitó hace tres semanas el bloque 67 donde se aprecian las humedades. información

El bloque 67 de la Colonia Santa Isabel de San Vicente del Raspeig es el que más necesidades tiene, el que está en peores condiciones y donde el Ayuntamiento se está encontrando con más problemas. La Concejalía de Urbanismo advierte de la nefasta situación de este inmueble y de la necesidad de actuación inmediata para evitar «el riesgo de colapso», por lo que su concejal, Mariló Jordá, no entiende que ahora se estén poniendo pegas a los arreglos «urgentes» que, de forma subsidiaria, el Consistorio quiere acometer.

En el bajo, propiedad del Obispado, existen filtraciones de la bajante que tiene que ser canalizada hacia el alcantarillado. La actuación debían acometerla los propietarios del inmueble al tratarse de un elemento común. Al no hacerse cargo los vecinos, el ayuntamiento actúa de forma subsidiaria. Y por ello la semana pasada envió a un fontanero para arreglar la bajante, pero se encontró con la negativa a acceder al inmueble.

La concejal de Urbanismo lamenta esta situación y recuerda que hasta ahora siempre había habido buena relación respecto al arreglo del inmueble, que incluso fue apuntalado por los dueños. Afirma no entender el cambio de actitud en una actuación que considera «urgente».

Desde el Obispado explican que no se han negado al acceso del fontanero, sino que le pidieron que antes de entrar debía de solicitarlo por escrito. Que es un tema de procedimiento y que han pedido que se les notifique por escrito la actuación a desarrollar «para dejar constancia».

El Ayuntamiento envió el escrito el pasado miércoles pero lamenta que todavía no ha recibido respuesta. Fuentes técnicas reconocen que el propietario «está incumpliendo la obligación de reparar el edificio, como propietario y como miembro de la comunidad de propietarios, si ellos no lo hacen lo tiene que hacer el Ayuntamiento a través de una ejecución subsidiaria». Y añaden que el dueño «tiene la obligación de dejar pasar al Ayuntamiento». Señalan que el siguiente paso, de no recibir ninguna respuesta, es acceder con una orden judicial.

Jordá critica que hasta ahora han tenido buena relación con el Obispado y lamenta que este trámite es perder un tiempo necesario porque «el fontanero se fue sin hacer el arreglo cuando el edificio está emitiendo sus aguas fecales directamente en el bajo, poniendo en peligro la estabilidad del edificio, y con su negativa no hemos podido hacer la conexión con el alcantarillado», advertía.

A ello se le une una noticia que los propios residentes en Santa Isabel le han dado a la concejal. Mariló Jordá no daba crédito al comprobar que el bajo que pertenece al Obispado ha sido puesto en venta por 10.000 euros. En el anuncio de venta no se oculta que está apuntalado y en malas condiciones y que debe de reformarse completamente, pero en él también se asegura que el piso está para restaurar «pero dentro del nuevo plan del Ayuntamiento para reformar el resto de edificios de la Colonia Santa Isabel».

La concejal se mostraba enfadada porque afirmó que lo que hace el Ayuntamiento es arreglar una bajante y «lo de la rehabilitación no está claro y ellos dan por hecho que lo pagamos nosotros, cuando lo que hemos hecho es una ejecución subsidiaria».

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats