La fiesta de Moros y Cristianos ya está en las calles de San Vicente del Raspeig. Empieza a tomar forma el corte de las calles por las que discurrirán los desfiles y en Ancha de Castelar, a la altura del cruce con la avenida de la Libertad, se ultimaban ayer los trabajos de instalación de la tribuna de autoridades que presidirá las entradas festeras del sábado y domingo y la procesión del lunes.

Las comparsas comenzaron ayer a montar las carpas donde celebrarán las fiestas hasta el martes 5 de abril, por lo que arrancaron los cortes de calles. Una operación que se efectúa de manera escalonada hasta mañana.

El castillo, protagonista el martes de la embajada infantil y del concierto Avís de Festa, está siendo decorado para la embajada mora del sábado, y la cristiana del martes. Además de instalar banderolas, también se coloca una tarima con la grada donde se situarán los espectadores. A la vez, se está vallando el perímetro del castillo y colocando adornos .

A las puertas de los grandes desfiles y de las embajadas que arrancan este fin de semana, los festeros abrieron boca anoche con la celebración de la Entraeta Cristiana que abrió la comparsa capitana, Estudiantes, seguida de las Visigodos, Astures, Navarros, Contrabandistas, Almogávers, Maseros, Nómadas, Caballeros Templarios y Cristians.

Y esta mañana se celebra un acto muy querido y emotivo por los sanvicenteros, la entronización de la imagen de San Vicente Ferrer en su carroza en la iglesia de San Vicente Ferrer. A las ocho y media de la mañana se inician los preparativos para el descenso de la imagen del santo. Y a las diez y media de la mañana es el momento previsto en el que ayudado por arneses y con un sistema de gran precisión alcanzado durante años de práctica, se coloca la imagen en su carroza. Y ello será anunciado con un volteo de campanas. Los sanvicenteros entonces podrán acudir al besamanos de la imagen del patrón y de las reliquias de su vestidura.