El Servicio de Protección de la Naturaleza (Seprona) de la Guardia Civil ya descartó en enero que la laguna de agua estancada en el barranco de Les Canyades, denunciada por EU y la Asociación de Afectados por el Vertedero en febrero, estuviera originada por un vertido tóxico procedente de la planta de basuras. Desde Compromís, que ostenta la Alcaldía en El Campello, manifestaron su «perplejidad»por la insistencia de EU en este tema, asegurando que carecen de base sus denuncias. El equipo de gobierno reitera que esas aguas ya se analizaron en enero, cuando llegó una primera denuncia vecinal, y la posterior denuncia de EU un mes después es sobre la misma laguna, aunque esta formación alerta que se debería haber analizado otra vez sus aguas.

Compromís reitera que «se han realizado todos los análisis», tanto por parte del Institut d'Ecologia Litoral el 13 de enero, como por el Seprona el 21 de enero y posteriormente por parte de Proaguas en su habitual control de las aguas subterráneas, dando como resultado que se trata de aguas de lluvia estancadas, y que en ningún momento se puede calificar de «grave atentado ecológico» como lo ha considerado EU. Por todo ello «lamentamos que un tema tan delicado como este, que puede afectar a la salud de los ciudadanos, sea motivo de manipulación partidista, y se llegue a confundir la legítima defensa de temas vecinales con denuncias políticas».