La Concejalía de Urbanismo de San Vicente del Raspeig actuó de oficio esta semana para poner solución al deterioro que sufre el bloque 67 del barrio Santa Isabel. Técnicos municipales entraron en el bajo derecha del edificio este pasado jueves, a través de una autorización judicial, para llevar a cabo el saneamiento y apuntalamiento de la vivienda.

La concejala de Urbanismo, Mariló Jordá, señaló que esta actuación se produjo «con la intención de detener la degradación del edificio» y destacó que el objetivo es que «los vecinos puedan mantener sus viviendas».

Urbanismo realizó la apertura de huecos de ventilación en las ventanas tapiadas, además de la desinfectación, desinsectación y desratización del interior de la vivienda, tal como indicaron fuentes municipales. Los técnicos constataron que no existen filtraciones aunque el forjado está gravemente dañado. Por ello, apuntalaron el baño, la cocina y la galería, según fuentes municipales.

El Ayuntamiento ha tenido que intervenir con una orden judicial debido a que la propietaria de la vivienda no ha podido ser localizada y los costes de la actuación se le remitirán a través de SUMA.

En la otra vivienda afectada, el bajo izquierda, propiedad del Obispado, se llevaron a cabo mejoras hace unas semanas atendiendo los requerimientos del Consistorio. En este caso se limpió y desinfectó la vivienda, además de apuntalar parte del inmueble. En esta vivienda existen filtraciones de la bajante que tienen que ser canalizadas hacia el alcantarillado. «Esta actuación debe ser acometida por los propietarios del inmueble al tratarse de un elemento común. En caso de que los vecinos no puedan afrontar el coste, el Ayuntamiento actuará de forma subsidiaria en el plazo de quince días», según indicaron fuentes municipales.

Jordá recordó que este problema se remonta al año 1993. Desde entonces los vecinos no han dado solución a las filtraciones de la bajante. El bloque 67 cuenta con 14 viviendas habitadas y 15 están vacías.

La Asociación de Vecinos del Barrio Santa Isabel solicitó hace unas semanas al Ayuntamiento la actuación inmediata para poner solución al deterioro del bloque 67, uno de los que peor se encuentran en el barrio. El inmueble mostraba en su fachada manchas de humedad de grandes dimensiones que podrían afectar a la estructura del edificio.