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El Consell conectará la zona norte de El Campello con la depuradora de Sant Joan

La Epsar ultima un proyecto para conducir las aguas negras al complejo de l'Alacantí Nord

Imagen de la moderna depuradora que el Consell dejó a medio construir en 2009.

La Generalitat ultima un proyecto para conectar la red de saneamiento de la zona norte de El Campello con la depuradora l'Alacantí Nord, en Sant Joan, para así acabar de una vez con los vertidos de fecales y sus problemas con el tratamiento residuales. Unos vertidos que, por otra parte, siguen.

La Conselleria de Medio Ambiente a través de la Entidad de Saneamiento de Aguas (Epsar) ha informado al Ayuntamiento de las últimas incidencias detectadas en la obsoleta depuradora de Cala d'Or. En concreto se detallan dos «vertidos de alta carga contaminante» en noviembre y diciembre de «origen desconocido» en la estación, que por otra parte es de tratamiento primario, es decir se limita a separar los elementos sólidos del resto, por lo que no es capaz de limpiar el agua. Y ese caudal acaba en el barranco que da a Cala Baeza.

EU denunció ayer estos vertidos ilegales y acusó al equipo de gobierno de ocultar información al respecto y de no tomar medidas para solucionar un problema por el que el Ayuntamiento paga todos los años miles de euros en multas a la Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) y que se viene sufriendo desde al menos 2008. Una grave deficiencia que debería haber quedado resuelta por la construcción de la depuradora de El Campello, en Les Canyades, cuyas obras arrancaron en 2008 y se paralizaron en 2009 por falta de fondos y porque la crisis hacía pensar que el frenazo de la construcción de viviendas haría que este complejo, destinado a la zona norte, quedaría infrautilizado. Las obras, valoradas en 12 millones, se abandonaron. En 2014 la Generalitat anunció que descartaba definitivamente acabarla y que estudiaba como solución conectar la zona norte con la depuradora de Sant Joan, levantada en 2011 y que tampoco opera a pleno rendimiento.

Desde el Consistorio explicaron ayer que el nuevo gobierno de la Generalitat también ha descartado terminar la obra y que ha decidido desviar las aguas residuales de la zona norte a través de una nueva conducción hasta Sant Joan. Para ello, la Epsar está terminando de redactar un proyecto, tras el que tendrá que buscarse los fondos -aún se desconoce su coste- y firmarse un convenio entre Generalitat y Consistorio para desarrollar la actuación, una obra que el tripartito considera la única solución para acabar con por ejemplo los problemas de Cala d'Or.

EU ya presentó una denuncia sobre los vertidos ilegales de fecales de la depuradora ante la Fiscalía hace justo un año, y el Instituto d'Ecologia Litoral pidió hace ya dos años que se prohibiera el baño en Cala Baeza, donde desembocan los vertidos de la estación, y se tomarán medidas para mejorar la calidad del agua de esta zona, como abrir un canal para que se renueve el agua, ya que allí se estanca el agua al ser una dársena. Pero hasta ahora no se ha hecho nada.

En el último pleno EU presentó una moción con medidas para solucionar los vertidos ilegales,que incluía distintas actuaciones a corto, medio y largo plazo, recogidas de las recomendaciones del Institut, además de solicitar a la Diputación que colaborara económicamente en el proyecto de la Generalitat de construir un colector para desviar las aguas fecales a la depuradora de Sant Joan. El portavoz de EU, Pedro Mario Pardo, explicó ayer que su formación retiró la moción «tras la promesa del equipo de gobierno de facilitarnos al día siguiente todos los expedientes, y que EU valoró positivo en pos de abrir una vía de diálogo y cooperación para solucionar el problema, lamentando que el compromiso haya sido incumplido por el equipo de gobierno». Y días después ha llegado el escrito de la Epsar alertando de los vertidos contaminantes.

Pardo mostró ayer su preocupación al haber pasado dos años de las recomendaciones del informe del Institut y que no se haya ejecutado una sola medida de calado, entre ellas mejorar de forma provisional la depuradora de Cala d'Or, en lo que considera «un problema gravísimo de contaminación y salud pública de la zona».

Desde el tripartito negaron ayer falta de transparencia e insistieron en que la única solución es la conexión con Sant Joan, proyecto en el que se está trabajando.

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