Una versión del Gernika de Picasso de grandes dimensiones fue ayer la obra central de la exposición del artesano de la madera Joaquín Monllor, artista invitado de la edición de diciembre de Art al Carrer, en la avenida de La Libertad de San Vicente del Raspeig.

La obra, de dos metros y medio por algo más de un metro, versión del famoso cuadro de Picasso, fue la de mayores dimensiones de las que se expusieron, pero también hubo obras que evocaban el pueblo de la niñez del artista agrupados en una colección llamada «Records del nostre poble», así como paisajes de la ciudad de Alicante o el Castillo de Vélez Blanco, entre otros.

Joaquín Monllor ha desarrollando su actividad profesional en las áreas de ebanistería y de carpintería desde el año 1973. Y ayer «regaló» al público que asistía a la exposición con una puesta en escena de su trabajo, al trabajar la madera in situ para contar gráficamente cómo se realiza un pirograbado.

Una propuesta diferente

Para apostar por esta cita mensual de San Vicente con la cultura acudieron tanto el alcalde, Jesús Villa como la concejal de Turismo, Asunción París. Esta última destacaba que el artista local «nos ha ofrecido una selección de sus pirograbados en marquetería y sombreados en madera de nogal, una propuesta artística diferente de lo habitual».

Para el primer edil la obra de este vecino de San Vicente es «de gran dificultad técnica y que requiere de una gran maestría».