El Campello tiene abierta su crisis de gobierno tras la expulsión de Esquerra Unida del equipo de gobierno. El alcalde, Benjamí Soler hacía un llamamiento al PSOE, la alternativa para garantizar una mínima estabilidad. En la rueda de prensa que los cinco concejales y el primer edil ofrecieron el viernes apelaron directamente a la «responsabilidad» del partido socialista. Por segunda vez volvió a expresar que «ahora es el momento» y exponía que el municipio no se puede permitir constantes cambios y necesita de la estabilidad de un equipo de gobierno centrado en el trabajo.

El portavoz del grupo socialista, José Varó, conoció por los medios de comunicación la noticia del cese de la edil de EU, Raquel Pérez, y la expulsión de la formación del equipo de gobierno, no porque se lo comunicara nadie del equipo de gobierno. Varó se muestra muy prudente y explica que es un tema interno en el que no quiere intervenir.

Sobre las alusiones directas a que su formación se integre en el equipo de gobierno, que son constantes, el portavoz del PSOE reconoce que están dispuestos a sentarse a negociar con el equipo de gobierno siempre que se convoque una reunión de forma oficial. «Lo que ha habido han sido distintas voces que nos dicen: Oye, tenéis que entrar, pero de ahí no se ha pasado». Varó espera que se convoque una reunión formal para valorar las posibilidades de entrar en el Ayuntamiento.

Por otro lado, la expulsión de EU del equipo de gobierno genera entre otros cambios la desaparición de los dos asesores que tiene esta formación en el Ayuntamiento como soportes. Uno de ellos es el futuro concejal, Pedro Mario Pardo, y otro el responsable de Comunicación, Ángel Mora. Pardo señala que mañana lunes irá a trabajar puesto que no ha recibido ninguna comunicación y reconoce que «nadie nos ha dicho nada, espero que nos digan algo, pero yo iré a trabajar».