Desde 1.300 hasta 630.000 euros. Estas son las cantidades entre las que oscila el patrimonio de los 21 ediles del Ayuntamiento de Sant Joan. Así lo reflejan las declaraciones de bienes y actividades efectuadas por todos los concejales tras la toma de posesión del nuevo Ayuntamiento. Un documento que destapa grandes desigualdades económicas entre los regidores de la Corporación local. En la relación de cifras destaca también que gran parte de los regidores no tienen contraído ningún préstamo bancario, así como que una cuarta parte de los mismos no tiene inmuebles a su nombre, según los datos publicados ayer en el Boletín Oficial de la Provincia (BOP).
El portavoz del grupo municipal de Ciudadanos, Ignacio Gisbert, es el que más bienes posee del Ayuntamiento. El activo del edil supera el medio millón de euros. Cuenta con bienes inmuebles por valor de 415.000 euros y otros bienes por 215.570 euros. En total, suma 630.570 euros. Aunque cabe destacar que debe 189.181 euros, siendo también el concejal con el pasivo más elevado. En el apartado de actividades, Gisbert declara que durante el pasado ejercicio ingresó 25.172 euros.
Entre los ediles con un nivel económico más elevado se encuentran también la edil popular Charo Tomás, y el concejal de Hacienda, Llorenç Román, de Compromís. El activo de la que fuera responsable del área de Comercio durante el pasado mandato alcanza los 311.381 euros, entre bienes inmuebles y otros. Destaca que sus ingresos por actividades durante el ejercicio 2014, cuando tenía delegaciones en el Consistorio, se cifran en 980 euros. Román, por su parte, es el tercer patrimonio más alto de la Corporación. Así, suma 245.886 euros entre inmuebles y otros bienes. Su nivel de deuda también es superior al de otros compañeros municipales. Debe 118.100 euros.
En el grupo de concejales con seis cifras en su declaración de bienes también están los regidores populares Javier Yebes, Modesto Baeza y Víctor García Berenguer, con 214.522, 176.887 y 167.586 euros, respectivamente. Asimismo, el edil de Ciudadanos José Ángel Rivera también posee propiedades por valor de más de 100.000 euros. En concreto, declara un total de 109.363 euros. Del grupo socialista, tan solo la responsable del área municipal de Sanidad y Educación, Esther Donate, se encuentra entre los mejor posicionados en cuanto a su economía. Cuenta con un activo valorado en 125.350 euros.
Contrastes
En cambio, la cantidad que declara el alcalde de Sant Joan, el socialista Jaime Albero, en lo relativo a bienes, contrasta con los datos aportados por algunos de sus compañeros de Corporación. Así, cifra en 30.500 euros su activo. Un total de 19.455 euros en concepto de bienes inmuebles y 11.044 euros en otros bienes. Cabe destacar que debe 106.944 euros y que sus ingresos por actividades en 2014 se limitaron a 13.433 euros.
El exalcalde de Sant Joan y actual portavoz del PP, Manuel Aracil, posee un activo de 55.908 euros frente a los 184.680 que declara en concepto de préstamos. Sus ingresos durante el pasado año, cuando era primer edil, ascienden a 68.676 euros.
Propiedades
Llama la atención que casi un tercio de los miembros de la Corporación santjoanera no declara bienes inmuebles. Así, seis de los 21 regidores no tienen propiedades a su nombre, según la relación de datos publicada en el boletín provincial. Se trata de los dos ediles de Decido, Santiago Román y Octavio Seva, los concejales de Compromís Sergio Agueitos y Alba Lledó, la exresponsable popular del área de Juventud, Almudena Rico y la edil de Esquerra Unida, Clara Rodríguez. Esta última cifra el valor total de sus bienes en 1.300 euros, siendo la que menos declara de todo el Consistorio.
Ingresos
Asimismo, destaca que cuatro miembros del actual equipo de gobierno no contaron con ingresos por actividades durante 2014. Dos de ellos del grupo socialista, Antoni Manel y Anaí Carreño, y otros dos de Compromís, Sergio Agueitos y Alba Lledó.
