El actual ayuntamiento sanvicentero no está a favor de la privatización del velódromo, pero asume que es así como se hizo, por lo que advierten que lo que más interesa en estos momentos es que la instalación esté en condiciones y se dé un servicio adecuado. El alcalde, Jesús Villar, quiere sentarse con los concesionarios para hablar con ellos sobre la instalación, las necesidades y todo aquello que queda pendiente. «La primera vez que me reuní con ellos les dije que nunca se debía haber privatizado. Nuestra exigencia en estos momentos es que cumpla con las condiciones marcadas y que den el mejor servicio al municipio», explica Villar. v. m.