Toñi se asombra de cómo ha aprendido Aurora el proceso de cocer unos huevos que, tras pelarlos, está rellenando con la masa que han preparado. La primera es alumna del curso de atención sociosanitaria a personas dependientes en instituciones sociales del programa Empleo Direct en San Vicente del Raspeig. La segunda tiene discapacidad intelectual y es usuaria del Centro Ocupacional Maigmó. Ambas participan en una jornada de elaboración de cocina saludable y fácil en el que están las siete alumnas del programa Empleo Direct y ocho usuarios del Maigmó. Y la experiencia que han vivido es gratificante para ambas y una clase práctica de empatía y comunicación con uno de los colectivos con los que tendrán que trabajar cuando terminen sus estudios. Ilusión es la palabra que define a Aurora y sus compañeros cuya experiencia empezaba decidiendo el menú a cocinar. Luego compraban los ingredientes en el mercado que les regalaba la asociación de comerciantes y subían a la cocina del Ayuntamiento de San Vicente del Raspeig, que está sobre el mercado, para guisar con la ayuda de las alumnas del taller de Empleo Direct.
Toñi, parada de larga duración, ha encontrado su vocación en la ayuda a los más desfavorecidos. Nada que ver con su antigua profesión en artes gráficas. «Tenemos una formación teórica muy buena y una práctica también genial, pero es dura, hay que valer. Sobre todo en la geriatría con demencia». Y resume su experiencia: «he descubierto campos en mí que no conocía que me aportan serenidad, relatividad y conocimiento de mí misma. Es un trabajo gratificante, pero duro física, humana y mentalmente». Carmen Lorenzo es monitora del Centro Ocupacional Maigmó y explica que la experiencia ha supuesto «sobre todo mucha ilusión porque están en otro entorno, conocen otra gente, se dan cuenta que les hacen colaborar. Han elegido el menú, han comprado y están haciendo por grupos los huevos rellenos del primer plato, otros los macarrones boloñesa y otro grupo hace la tarta de chocolate con fresas. Y luego nos lo comeremos».
La concejala de Empleo y Desarrollo Local, Carmen Victoria Escolano, explica que «el objetivo de este taller es que las alumnas apliquen los conocimientos teóricos adquiridos» y apunta que las siete alumnas llevan varias semanas colaborando en la asistencia a dependientes en la residencia de mayores y lo compatibilizan con la formación teórica en el Caserón Haygón. «Su formación va dirigida a atender a mayores o dependientes en residencias e instituciones, por lo que deben enseñar a estas personas a cocinar menús adaptados a sus necesidades, en este caso con productos frescos donados por el Mercado Municipal».
