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San Vicente del Raspeig

Una cooperativa que les ha salvado la vida

El proyecto Gema, puesto en marcha por Cáritas hace dos años, permite a varias personas que estaban en riesgo de exclusión recuperar la dignidad

Una cooperativa que les ha salvado la vida

Ha sido más duro de lo que pensaban cuando montaron la cooperativa hace dos años, a veces no descansan ni los domingos y algunos se quedaron el año pasado sin vacaciones, pero aun así el proyecto Gema sale adelante. Se trata de una empresa de economía social impulsada por Cáritas y que funciona en una nave de la carretera de Agost donde se reparan o desguazan electrodomésticos y otros enseres que la gente desecha. Los objetos que están en mejores condiciones se venden en tienda que tienen allí mismo; otros se ofertan por internet o en los mercadillos de La Nucía y Muchavista; y una parte importante se desguaza y se vende como chatarra. Los martes recogen por toda la provincia el material a quienes contactan con ellos llamando al 965 17 66 42.

Cinco socios forman la cooperativa: el gerente, Serafín García Rodes, que es la persona de Cáritas que impulsó el proyecto, y cuatro personas en riesgo de exclusión social. También han podido contratar dos días a la semana a un técnico experto en reparaciones, José Vicente Berenguer, quien después de cinco años en el paro aquí al menos ha vuelto a cotizar, aunque sea poco. A sus 59 años de edad, este profesional tiene a gala haber logrado dos titulaciones superiores en el IES Canastell, donde fue hasta hace poco el alumno de más edad. «Fue un sacrificio, pero creo que ha valido la pena. Por lo menos tengo ilusión, algo por lo que preocuparme y me sirve para seguir formándome», cuenta el técnico.

También Lucio López, uno de los diez voluntarios que apoyan a la cooperativa, obtiene la doble satisfacción de ayudar a la cooperativa reparando objetos electrónicos que luego pueden vender y, de paso, encontrando de vez en cuando piezas «de museo» como tocadiscos o magnetófonos que luego compran los coleccionistas.

¿Qué ingresos consiguen los socios con este equipo? «Pues lo que cualquier autónomo en España, les da para pagarse el alquiler, llevar una vida digna, cotizar», explica García Rodes.

La tienda es fundamental, pero no habrían salido adelante sin la ayuda que reciben del Fondo Social Europeo a través de la Generalitat y de la aportación que realiza Inditex a través de Cáritas España. Este grupo empresarial «nos proporcionó el capital semilla para empezar a funcionar y ahora ha renovado la ayuda, lo que nos permitirá que entren cuatro personas más y contratar a un técnico de seguimiento», relata el gerente.

Los cooperativistas tienen una media de 53 años y antes de integrarse en Gema estaban en paro, con un nivel de «empleabilidad» muy bajo y alguno vivía en la calle.

Rafael, un desempleado del sector de la restauración que ahora tiene 47 años de edad, recuerda que «al principio era muy lento y tenía una energía muy negativa, pero esto me ha permitido nacer de nuevo». Después de formarse en el instituto Canastell, que también ayudó a impulsar este programa, ahora lleva un año y cuatro meses ocupándose de la limpieza de las lavadoras, algo que nunca imaginó, pero asegura que «le encanta».

Otro socio, Francisco Javier Lamata, lleva sólo 6 meses ya que fue voluntario mientras estuvo cobrando la ayuda para mayores de 50 años. Este maestro industrial , que igual se ocupa de la electrónica que pinta el instituto Canastell, cuenta que este trabajo le ha servido para volver a «sentirse persona». «Aparte de solucionarte la vida económicamente -indica-, te ayuda a creer en ti mismo».

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