La calle Ancha de Castelar quedó ayer por fin cortada al tráfico para iniciar las obras de construcción de un nuevo tramo del colector de aguas pluviales. Los conductores que sobre el mediodía se adentraron por este vial en sentido Norte fueron desviados hacia la calle Pintor Picasso y los autobuses urbanos e interurbanos, así como los escolares ya estuvieron circulando por La Huerta, donde tendrán su recorrido y paradas durante los próximos meses.

Lo que se inició ayer fueron los trabajos previos a la construcción de un colector entre Pintor Picasso y Pintor Sorolla. Las obras cuentan con un presupuesto de 239.927 euros financiados por la Diputación y se prolongará hasta el 27 de marzo, ya que el compromiso de la empresa constructora es reabrir el vial «antes del inicio de las celebraciones de Semana Santa y de las fiestas Patronales y de Moros y Cristianos», informó el Consistorio.

El concejal de Infraestructuras Rafael Lillo, quiso «agradecer de antemano la compresión de comerciantes, vecinos y conductores ante las posibles molestias que una obra de esta envergadura conlleva» pero destacó que esta actuación es «absolutamente necesaria para eliminar el riesgo de inundaciones que existe en esta zona ante episodios de lluvias torrenciales».

Las obras se dividirán en tres fases para reducir molestias. La primera se ejecutará entre Blasco Ibáñez y Capitán Torregrosa, la segunda entre esta última y la avenida de la Libertad y la tercera en el tramo restante hasta Pintor Sorolla. La conducción que se va a instalar es de 80 centímetros de diámetro y se enterrará a dos metros de profundidad. En superficie hay previstos catorce captadores.

El proyecto también ha obligado a dirigir hacia la calle La Huerta los autobuses de las líneas 24, 30 y 45 del TAM, además del transporte escolar. Allí se han habilitado paradas provisionales, que se han señalizado para que estos vehículos de pasajeros no obstaculicen el carril de circulación. La información de los desvíos y puntos de subida y bajada al bus puede consultarse aquí.