La empresa concesionaria del Complejo Deportivo Sur de San Vicente del Raspeig, Josector Juan Luis S. L., quiere ubicar cuatro establecimiento comerciales y una clínica de fisioterapia y estética en las instalaciones, tal y como ha solicitado al Consistorio a través de un escrito al que ha tenido acceso este diario. El aumento de la oferta implica la ejecución de obras para ampliar el recinto. Un paso para el que la mercantil ya ha pedido licencia ante el Ayuntamiento, como ya adelantó este periódico hace unos días.
Como se recordará, el complejo aún no ha sido abierto al público pese a que el contrato con la concesionaria para explotar las instalaciones se firmó el pasado 3 de octubre. De hecho, la alcaldesa de San Vicente, Luisa Pastor, solicitó a la mercantil «la puesta en marcha de la instalación, así como el cumplimiento del resto de obligaciones reflejadas en el pliego de condiciones», mediante un decreto del pasado 10 de diciembre. Con todo, de momento, el recinto deportivo permanece cerrado.
La adjudicataria pretende abrir cuatro tiendas agrupadas en distintos focos de negocio, según se detalla en la petición registrada ante el Ayuntamiento. El primero de los comercios será de deportes, «para dar servicio a los usuarios, en primeras necesidades, bolas de pádel, palas, etcétera». Habrá un segundo de dietética y nutrición. El tercer establecimiento se centrará en las bicicletas, con servicio de custodia, para la atención a los ciclistas «debido a la importancia de que los usuarios puedan ir a entrenar sin la necesidad de traer siempre la bicicleta y el equipamiento necesario». El último de los locales tendrá como fin el entrenamiento personal, con «el servicio de chaleco vibratorio para la mejora del rendimiento». Además, según se expone en el documento, la mercantil también quiere poner en marcha una clínica de fisioterapia y estética.
La petición de la concesionaria se debatió ayer en la comisión previa al pleno municipal, donde se votará la propuesta. Con todo, cabe destacar que desde el equipo de gobierno manifestaron su buena disposición a la iniciativa de la adjudicataria. «Permite mejorar el complejo y, por tanto, dar un servicio más completo al ciudadano»,, valoró el edil de Deportes, José Rafael Pascual.
Desde EU, sin embargo, se opusieron a la propuesta al entender que el cambio responde «al beneficio económico de una empresa». «La infraestructura fue concebida y diseñada para prestar un servicio público», reivindicó la portavoz del grupo, Mariló Jordá, y lamentó que la apertura del recinto vaya a coincidir con las obras de ampliación. Además, insistió en la «singular arquitectura» del edificio y lamentó que vaya a ser reformado «antes de su inauguración».
