La rápida intervención de Salvamento Marítimo evitó ayer tarde una desgracia tras el hundimiento en El Campello de un pesquero con base en La Vila Joiosa. Los tres tripulantes de «El delfín de Andalucía», un viejo arrastrero de madera de 14,4 metros de eslora y construido en 1926, fueron rescatados con síntomas de hipotermia tras llevar quince o veinte minutos en el agua tras hundirse el pesquero a causa de una vía de agua originada por causas desconocidas. La embarcación Salvamar Polaris trasladó a los náufragos hasta el puerto de El Campello, donde fueron atendidos por personal sanitario por los síntomas de hipotermia y dos de ellos, de 45 y 37 años, fueron trasladados al Hospital de Sant Joan, según señalaron fuentes de Salvamento Marítimo y del Centro de Información y Coordinación de Urgencias (CICU).

El naufragio se produjo poco después de las cinco de la tarde, cuando soplaba un fuerte viento de nordeste y en una zona donde había siete metros de profundidad. A las 17 horas, el arrastrero alertó a través de la emisora de que estaban navegando con una vía de agua. De inmediato el Centro de Coordinación de Salvamento Marítimo en Valencia movilizó a un helicóptero y a la embarcación de intervención rápida con base en Alicante, la Salvamar Polaris.

El arrastrero, que regresaba a La Vila tras faenar, navegaba cerca de la costa y mantuvo inicialmente contacto con Salvamento Marítimo, hasta que las comunicaciones se interrumpieron al hundirse cerca del puerto campellero, a unos 400 metros de la costa. Antes del hundimiento aún se llevaron otro susto cuando uno de los tripulantes cayó al agua y tuvieron que cambiar el rumbo para recogerlo. También se les paró el motor, pero pudieron arrancarlo de nuevo e intentaron llegar a El Campello, aunque al final fue llenándose de agua y optaron por tirarse al agua al ver que el barco se iba a pique.

La mala suerte parecía que les perseguía porque la balsa salvavidas se abrió pero no lograron alcanzarla. Uno de los tripulantes se agarró a un aro salvavidas mientras que los otros dos no llevaban nada y se agarraron a algún objeto flotante del naufragio.

La alerta de la radiobaliza del pesquero, indicando la posición del naufragio, también llegó al Centro Nacional de Coordinación de Salvamento.

Cuarenta minutos después de dar la voz de alarma por la emisora, la embarcación de Salvamento Marítimo llegó al lugar del hundimiento. Dos de los náufragos estaban juntos, mientras que el tercero estaba a unos veinticinco metros de distancia. La impresión de los equipos de rescate fue que pese a llevar solo quince o veinte minutos en el agua estaban justos de fuerzas y presentaban síntomas de hipotermia.

Tras efectuar el rescate la Salvamar Polaris trasladó a los náufragos a El Campello, donde estaban las ambulancias, la Policía Local y la Guardia Civil. Luego comprobó que no había restos de contaminación, aunque parte del barco asomaba fuera del agua. El helicóptero del Consorcio de Bomberos también fue movilizado, aunque no llegó a intervenir.

Antes de poder contactar con los tripulantes rescatados, un portavoz de la Cofradía de Pescadores de Villajoyosa señaló que el barco tenía allí su base desde hace un año, aunque el armador es de El Campello. Dos tripulantes son vecinos de El Campello y uno de La Vila. El portavoz señaló que el arrastrero de 1926 estuvo hace una semana en el varadero y pasó la revisión.