Un intenso color verde, palmeras, rosales, cipreses, un auténtico oasis en el pleno casco urbano de Mutxamel. A la izquierda, la fachada del antiguo caserón, castigada por los años, unos pasos más allá el laberinto, reconstruido, comienza a tomar forma y mucho más atrás, tras unas escalinatas rehabilitadas, la enorme balsa.
Las acequias atestiguan el siglo y medio de los Jardines de Peñacerrada, y los trabajadores que forman parte del segundo plan de empleo se empeñan en la rehabilitación de la exedra, esa zona semicircular donde se encuentran bancos que se utilizaban para el descanso, en especial en los meses de verano.
Los Jardines de Peñacerrada están casi rehabilitados. Tras años de trabajos, el mes que viene concluye el segundo plan de empleo en que 22 personas han llevado a cabo labores de jardinería y rehabilitación de diferentes elementos arquitectónicos que conforman uno de los emblemas para la localidad, uno de los puntos de mayor atracción turística y que se espera abrir al público el próximo año.
Avances
Entre los principales avances de los últimos meses en los jardines, destaca la restauración del muro que da al pasaje Peñacerrada, donde se ha mantenido la altura original y se ha consolidado el remate superior. Asimismo, el muro posterior de los jardines se ha levantado en altura, medidas que buscan luchar contra los actos vandálicos que sufría este espacio habitualmente.
El responsable del taller de formación de restauración del patrimonio que contempla el plan de empleo, Pablo Gill, explica que también se han anclado los remates de las columnas en diferentes zonas del parque, y que quedan pendientes otras actuaciones como la consolidación del puente de madera junto a la Casa de las Brujas o la colocación de la valla perimetral, también de madera, que rodeará la balsa.
Por su parte, la responsable del taller de jardinería e instalación y mantenimiento de zonas verdes, Gemma Pérez, indicó que los trabajos en este ámbito consistieron en aplicar diferentes métodos de endoterapia vegetal contra el picudo rojo de las palmeras o la cochinilla que invadía la «opuntia sp», comúnmente llamada chumbera. Además, se ofreció a los alumnos conocimientos sobre el cuidado del jardín y sistemas innovadores como la creación de un jardín vertical. Tras la reciente jornada de puertas abiertas y la culminación de los trabajos, el Ayuntamiento informó de que espera poder abrir las puertas de este enclave lo antes posible, una fecha que ya se presume para 2015.
