Los distintos grupos de la oposición coincidieron ayer en que el alcalde de Sant Joan, Manuel Aracil, está actuando «a la desesperada» en cuanto al último paso dado por el regidor para forzar la llegada de la Universidad Católica al municipio. El portavoz del PSOE, Baltasar Ortiz, denunció que el primer edil quiere crear expectativas a los santjonaers de cara a las elecciones y advirtió de la «gravedad» que tiene «sortear» las normas del Consell por cumplir su promesa. «Iba a traer una Universidad y sólo ha conseguido que seamos una sucursal de Murcia», lamentó Ortiz . Por su parte, el representante de EU, César Vilar, criticó la falta de transparencia en el proceso. «Una vez más nos enteramos de las intenciones del alcalde por la prensa», censuró. Una crítica que respaldaron el resto de grupos. Por su parte, el portavoz del Bloc, Albert Caturla, consideró que con la propuesta Aracil busca «evitar asumir el fracaso de su proyecto». a. s. s.
