El Campello intensifica por tierra y aire los esfuerzos para suavizar las importantes molestias que generan los mosquitos en la zona de playa cercana al río Seco. A través del programa impulsado por la Mancomunidad de l´Alacantí, ayer un helicóptero realizó numerosas pasadas por el tramo final del cauce hasta su desembocadura, fumigando la zona con un producto biológico.

El objetivo es evitar que eclosionen las larvas de mosquitos con la llegada de las altas temperaturas, en una zona que desde hace tres años se ha convertido en un vergel por el agua que vierte la depuradora de Sant Joan y que no pueden aprovechar los regantes por la falta de una conducción.

Para que no se repitan episodios como los del pasado verano, cuando se registraron numerosas quejas vecinales por plagas de mosquitos, se ha adelantado este plan de choque más de un mes con la intervención del helicóptero, que permite llegar a las zonas inaccesibles adonde no alcanzan los vehículos todoterreno. Los medios terrestres actuarán todas las semanas y dentro de un mes volverá el helicóptero a realizar otra fumigación.

El primer edil, Juanjo Berenguer, explicó ayer que «debido a los problemas del pasado año se ha hecho una planificación exhaustiva para combatir los mosquitos. Pero además pedimos la colaboración de los vecinos porque nosotros sólo podemos actuar en zona pública, pero no en piscinas o macetas. La crisis ha hecho que el mantenimiento de las piscinas decaiga, y son un foco importante sobre el que deben actuar», ya sea clorando el agua o introduciendo carpas, ya que en las piscinas abandonadas o sin cuidar proliferan los mosquitos por el agua estancada y allí los servicios públicos no pueden llegar.

Por ello se han detectado decenas de estas piscinas de cuya ubicación se ha informado al Consistorio para que inste a los residentes a tomar medidas. Y también se han cartografiado las zonas del río donde se estanca el agua para actuar.

Desde la Mancomunidad destacaron que se trata de un actuación «fuerte y radical por toda la zona humeda del río con un producto biológico», y que con este plan se podrá controlar la plaga para que sea un «problema razonable». Por su parte desde la empresa Lokímica, responsable de la desinsectación y control de plagas en la Mancomunidad, señalaron que el helicóptero está disponible para cuando sea necesario volver a realizar un tratamiento de choque, como por ejemplo en caso de lluvias u olas de calor, y agregó que la sequía acrecienta el problema de los mosquitos. Del mismo modo se informó que el producto que se emplea, formulado a base de Bacillus Thunringiensis, conocido como Vectobac 12 AS, «es el único autorizado para parques naturales y es totalmente inocuo para el resto de la fauna y flora adyacente, incluyendo a los seres humanos, peces o mamíferos».

También recordaron que el caudal del río y su vegetación también atraen a otros insectos que no son mosquitos, y que hay numerosos peces que se han convertido en depredadores de mosquitos.

El principal problema surge cuando hay agua estancada, ya que por ejemplo el pasado año se tuvo que abrir un canal en la desembocadura del río para facilitar una salida a ese caudal acumulado que se convertía en un foco de mosquitos.