Hernández está acostumbrado a lidiar con las críticas acerca de la Ley Antitabaco. Una reforma que, tras mucho ruido, al final ha terminado siendo aceptada y respetada por la sociedad, hasta que el gobierno de la Comunidad de Madrid la ha vuelto a poner sobre la mesa con la intención de hacer una excepción a favor del complejo Eurovegas que se prevé instalar en la capital.

¿Permitir que se fume en Eurovegas es apostar por el empleo a costa de la salud?

El debate es otro: A santo de qué piensa un gobierno que se pueden saltar un a ley que protege a los trabajadores. Es de ciencia ficción que un país cuyo modelo productivo, basado en el ladrillo, y que se ha estrellado de esta forma, ahora piense que la solución puede venir por fomentar el juego y por construir más cosas. Cualquiera que venga de fuera pensaría que estamos locos de atar. Lo que quieren hacer no es apostar por el empleo, se trata de un negocio de baja categoría, que crea nuevas enfermedades y fomenta la ludopatía.

En Madrid, igual que Valencia, impera la política del recorte, ¿es sostenible el Sistema Nacional de Salud?

Es sostenible, aunque nos tenemos que acostumbrar a que algunas intervenciones son evitables. Se ha de utilizar con sensatez y apostar por ganar salud fuera del sistema sanitario. Por ejemplo, hay estudios que demuestran que el ejercicio en mayores tiene más beneficios que muchos fármacos.

Tras su paso por el Ministerio de Sanidad durante el Gobierno de Zapatero, ¿tiene pensado volver a la política?

No lo descarto. Es algo que me apasiona. He sido militante de partidos de izquierdas y tengo experiencia, he estado en un gobierno del PSOE, y a nivel europeo, he formado parte del consejo de administración del Centro de Control de Enfermedades de Suecia.