El agua seguirá un año más llenando de vida el río Seco. La Generalitat ha rechazado las enmiendas a los presupuestos de 2013 para financiar la obra necesaria para que los regantes aprovechen el agua de la depuradora de Sant Joan d'Alacant y deje de tirarse al río. Desde hace casi dos años, cuando se puso en marcha esta costosa infraestructura -33,7 millones de euros- construida por el Gobierno autonómico, más de dos millones de metros cúbicos se vierten anualmente al río, un caudal que sería una bendición para la Comunidad de Regantes de la Huerta de Alicante, radicada en Mutxamel y que engloba a agricultores de este municipio, Sant Joan, El Campello y parte de Alicante. Pero tendrán que esperar mientras ese agua sigue corriendo por el río Seco, convirtiéndolo en un vergel.

Pese a que la Mancomunidad de l'Alacantí, donde hay mayoría del PP, aprobó por unanimidad la propuesta del portavoz del PSOE campellero, Pepe Varó, para pedir al Consell que incluyera esta obra en las cuentas para este ejercicio, la Generalitat la ha desestimado, así como la presentada por los socialistas valencianos en las Cortes.

La falta de dinero en las arcas autonómicas imposibilita llevar ahora a cabo esta obra y el vertido de aguas depuradas, además de un despilfarro por no ser empleadas por los regantes, supone también un incremento en la factura de las aguas residuales. El Consell ha creado este año un canon por vertido de este tipo de aguas, que se supone que se repercutirá en los residentes en los recibos, algo que el PSOE considera "inadmisible".

Por su parte el alcalde de Mutxamel, Sebastián Cañadas, señaló ayer que el vicepresidente del Consell, José Císcar, que es el responsable de las consellerias de Agricultura y Agua, se ha comprometido con él para llevar a cabo la obra, este año o el próximo, y que se está buscando la viabilidad del proyecto, destacando que su coste, que puede rondar los 500.000 euros, es "factible" para la Generalitat y que se está a la espera de cifrar con más exactitud el presupuesto. En los últimos meses se ha hablado desde 400.000 hasta 800.000 euros, un baile de cifras con el que se quiere acabar para clarificar la partida necesaria. Cañadas destacó que pese a no haber salido adelante la enmienda "hay mucho interés" en llevar a cabo la obra, que los regantes están dispuestos a pagar una parte en sus recibos y recordó además que el hecho de tirar el agua al río supone un pago por canon de vertido que se ahorrarían si se dispusiera de la conducción.

La obra consiste en una pequeña estación de bombeo junto al río Seco, donde está la depuradora de l'Alacantí Nord, y una tubería de un kilómetro de longitud aproximadamente que conectaría con otra de los regantes que lleva hasta el Pantanet, en Mutxamel, desde donde la Comunidad de la Huerta de Alicante podría distribuir el caudal entre sus asociados.

El proyecto de la depuradora, que recibe diariamente 45.000 metros cúbicos de aguas residuales de parte de la comarca, contaba con la infraestructura necesaria para aprovechar este importante caudal, pero la falta de fondos obligó a aparcarla.

Del mismo modo el PSOE también va a insistir en las Cortes para que la Generalitat financie la obra, y evitar así que la depuradora vierta 360 metros cúbicos a la hora, que acaban en el mar y que han convertido su recorrido hasta el Mediterráneo en un pequeño vergel.