La Conselleria de Medio Ambiente ha constatado una serie de supuestas irregularidades en el tratamiento de basuras del vertedero de Les Canyades, en El Campello, que desde hace más de tres años viene causando graves molestias por malos olores a los vecinos de la zona norte. La inspección de la Dirección General de Calidad Ambiental a raíz de las denuncias sobre su funcionamiento por parte de vecinos y Ayuntamiento ha sacado a la luz unas deficiencias referentes a malos olores, falta de reciclaje e impermeabilización que podrían derivar por primera vez en un expediente de infracción administrativa.

Además, es la primera vez que trascienden irregularidades detectadas por la Conselleria de Medio Ambiente, que hasta ahora ha mantenido que las deficiencias que se han podido registrar en el complejo nunca han sido relevantes y no han derivado en infracción. Por ello parece que Medio Ambiente estrecha el control sobre la planta.

Fuentes de la Conselleria de Medio Ambiente informaron que el 29 de noviembre se giró una inspección en la que se "constataron una serie de irregularidades", entre las que destacan que "en el interior de la nave de compostaje se ha detectado un olor intenso de amoníaco y otros gases, indicativo de una insuficiente cantidad de aire en circulación, además de que las pilas de materia orgánica son altas, por lo que resulta previsible que la fermentación devenga parcialmente en anaerobia y el compostaje se inhiba. Estos olores desagradables también se aprecian en varios puntos del exterior, como la salida de rechazos, junto a los depósitos de biogás y cerca del foso de descarga".

Quejas vecinales

Estas emanaciones podrían estar relacionadas con los malos olores que sufren los vecinos, ya que hay que recordar que el informe encargado por los afectados a una empresa independiente alertaba de que las emisiones que procedían de la planta era potencialmente peligrosas para la salud por la presencia de sustancias tóxicas. De cualquier forma la Conselleria no realiza conjetura alguna al respecto.

La inspección también ha revelado que "las balas de rechazo -la parte de la basura que acaba en el vertedero porque no se puede aprovechar- contienen cantidades apreciables de materia orgánica, como lo confirma la existencia de charcos de lixiviados -agua contaminada por la degradación de las basuras que constituye una sustancia tóxica- junto a la embaladora y el predominante color gris parduzco de las mismas". Del mismo modo alerta que estas balas se acumulan en el exterior de la nave de tratamiento, a la intemperie, y que sólo se someten a compostaje algunas partidas de poda seleccionadas, ya que el resto se envía al vertedero ya que la trituradora de poda no está operativa.

Del mismo modo se advierte que hay "abundante" presencia de material ligeros en los viales, explanadas, zonas ajardinadas del interior del recinto, cunetas, zonas próximas al vaso de vertido... y que los camiones acceden al vertedero completamente descubiertos, lo que contribuye a este vuelo de materiales. También destaca que el número y disposición de chimeneas de desgasificación se limita al primer dique de cierre y no a la totalidad del vaso de vertido, y que se continúa con la explotación normal del vaso, sin que se haya realizado la impermeabilización de las paredes con el paquete sintético.

Correcciones

Por todo ellos la Conselleria advierte con fecha 20 de diciembre a la empresa responsable, FCC, a que justifique que ha corregido esta serie de deficiencias en el plazo de mes y medio, ya que de lo contrario podría constituir una infracción administrativa a lo dispuesto en la Ley de Prevención de la Contaminación y Calidad Ambiental.

Entre las medidas correctoras destaca que se ponga en marcha un sistema de aireación forzada de la nave de compostaje que evite la concentración de esos intensos malos olores. También pide una mejor separación de la materia orgánica del rechazo y otras medidas para evitar malos olores y acreditar un plan de limpieza de los residuos ligeros que se han detectado de forma abundante en el recinto, entre otras acciones, según consta en el requerimiento de Medio Ambiente.

Por su parte el alcalde Juanjo Berenguer, señaló ayer desconocer la existencia de este informe aunque destacó que "todo lo que se haga para que se cumpla con la legalidad vigente es bienvenido y me consta que desde la Generalitat se hacen muchas cosas, aunque no transciendan todas estas inspecciones".

Además, hay que recordar que la Conselleria de Empleo ha requerido a la empresa a que instale sistemas de detección de emisiones contaminantes ante el peligro de que los trabajadores puedan inhalar sustancias tóxicas. También cabe señalar que los vecinos han denunciado la actividad del vertedero ante los tribunales por los malos olores.

La empresa alegará al considerar injustificadas las advertencias

Fuentes de la empresa FCC, responsable de la explotación de la planta de tratamiento de Les Canyades, señalaron ayer respecto a esta inspección que el informe elaborado por la Conselleria es "una valoración" basada en una "impresión visual" que aseguran que en la mayoría de aspectos no se corresponde con la realidad. Por ello van a alegar contra la mayor parte de este informe al considerarlo subjetivo, y sólo acatarán determinadas peticiones, aportando justificación de su negativa al resto de medidas que solicita la Conselleria de Medio Ambiente.