Unidos contra la planta de basuras, aunque con matices. El pleno de El Campello aprobó ayer por unanimidad solicitar a la Conselleria de Medio Ambiente el cierre cautelar del vertedero de Les Canyades. Finalmente el equipo de gobierno del PP decidió respaldar la moción propuesta por la oposición en bloque, que forzó la convocatoria del pleno de ayer y que contaba con la mayoría necesaria -once concejales- para sacarla adelante sin los populares, que gobiernan en minoría con diez ediles.

Con la oposición unida por primera vez en mucho tiempo y el informe presentado por los afectados en la Conselleria alertando de altos niveles tóxicos en las emisiones de la planta, el PP optó, como había dejado entrever, por respaldar esta petición en base a la documentación que la respaldaba. Hay que recordar que el informe, del que el Consistorio ha pedido una valoración a Medio Ambiente y Sanidad por sus "preocupantes conclusiones", no es considerado por la primera como válido al estar elaborado por una empresa no homologada por la administración estatal.

La sesión plenaria fue tensa, interrumpida en varias ocasiones por el público que llenó la sala. Más de cien personas que aplaudieron el momento en el que se aprobó la petición de cierre, que deja el pelota sobre el tejado de la Conselleria. Ahora, con el informe existente y con la decisión del Ayuntamiento, los focos están sobre la Generalitat, aunque es casi imposible que acceda a las pretensiones del pleno. Pero puede servir para redoblar las presiones y vigilancia sobre la planta.

Desde la oposición acusaron al alcalde, Juanjo Berenguer, que apoyara la medida únicamente "para no quedar en evidencia en el pleno", sabedor de que la medida iba a salir adelante con los votos de la oposición. También lamentaron que el PP haya tardado tres años en unirse a la oposición en este tema y le exigieron un mayor compromiso.

Por su parte Berenguer insistió en que "con informes en la mano, iremos dónde tengamos que ir y con toda la fuerza que pueda tener este Ayuntamiento", recordando que hasta ahora no había informe alguno que alertara de la peligrosidad de los malos olores y que por ello no se ha podido actuar con más contundencia antes. Además, manifestó su esperanza de que la opinión de los servicios jurídicos de la Conselleria sobre que el estudio no es válido sea errónea y el juez pueda usarlo para actuar.

La moción aprobada anoche consiste en que el Ayuntamiento pide a Medio Ambiente "el cierre preventivo de la planta en base al informe remitido por Socioenginyeria SL, en el que afirma que ha quedado comprobada la exposición de los vecinos a una contaminación química odorífera y nociva muy elevada y muy frecuente, por el que existe un riesgo evidente para la salud y aconseja que no se autorice el funcionamiento de la planta de tratamiento de residuos sin un control externo independiente que garantice la salud de los vecinos en la zona norte".

Por otra parte el pleno también aprobó, esta vez con sólo los votos de la oposición, pedir al alcalde el regreso al protocolo inicial que permitía a los agentes acudir a verificar cada queja de malos olores, aunque en este tema la última decisión es de Berenguer, que afirmó que el actual protocolo funciona bien.

Además, todos los grupos apoyaron suprimir la paga extra de Navidad de ediles y cargos de confianza para dedicarla a ayudas sociales y educativas, con una moción presentada por Iniciativa-Els Verds.