El Campello pedirá el próximo jueves a la Conselleria de Medio Ambiente el cierre cautelar de la planta de basuras de Les Canyades, salvo sorpresa de última hora. El alcalde Juanjo Berenguer ha convocado para pasado mañana el pleno que ha forzado la oposición en bloque para, entre otros puntos, exigir a la Generalitat la clausura provisional del vertedero debido a las graves molestias por malos olores que genera. Una medida basada en el estudio encargado por los vecinos, y desacreditado por Medio Ambiente, en el que se alerta de la toxicidad de las emisiones.

La sesión, de carácter extraordinario y por tanto sin opción de intervención del público, tendrá lugar a las 19.30 horas y se prevé que los afectados por los malos olores acudan a la misma, ya que se trata de su principal reclamación: paralizar la planta hasta que no se solucione el origen de los hedores.

La moción está firmada por los portavoces de los cinco grupos de la oposición por lo que, de no ausentarse ningún edil y no dar marcha atrás nadie a última hora, la petición debería salir adelante. Hay que recordar que hace un año la oposición trató de aprobar una medida similar pero la abstención de la edil de Decido, Marita Carratalá, y el voto en contra del PP, frustró el intento. Ahora, parece que no será así y que PSOE, Bloc, EU, Iniciativa y Decido votarán en bloque a favor de la medida.

La moción consiste en la "solicitud de todos los grupos municipales de la oposición a Berenguer para que solicite a la Conselleria de Medio Ambiente el cierre preventivo de la planta de residuos de Les Canyades en base al informe remitido por Socioenginyeria SL, en el que afirma que ha quedado comprobada la exposición de los vecinos a una contaminación química odorífera y nociva muy elevada y muy frecuente, por el que existe un riesgo evidente para la salud y aconseja que no se autorice el funcionamiento de la planta de tratamiento de residuos sin un control externo independiente que garantice la salud de los vecinos en la zona norte de El Campello".

Ese estudio, remitido a la Conselleria por los vecinos, no es considerado como válido por Medio Ambiente al estar elaborado por una empresa que no está homologada por la administración estatal, un paso que acredita su independencia y calidad de los servicios y permite ser tenida en cuenta ante un juez, según manifestó el director de Calidad Ambiental de la Conselleria en el encuentro con vecinos del pasado miércoles.

El alcalde señaló ayer que en la comisión informativa de hoy darán a conocer, en un principio, la postura que mantendrá el PP en el pleno, aunque la pasada semana recordó que las medidas se toman "en base a informes".

Además, el orden del día incluye otra reclamación de la oposición en bloque para que se reanude el protocolo llevado a cabo por la Policía Local para el control de olores procedentes del vertedero, tal y como venía desarrollando hasta el pasado dos de agosto. Hay que recordar que entonces el alcalde ordenó que la Policía ya no acudiera a la zona norte para verificar las quejas vecinales, por motivos de operatividad y en base a una recomendación de la UMH, que está elaborando un estudio de la emisiones.

Tras la denuncia del sindicato policial SPPL acusando al alcalde de prevaricación y las presiones de oposición y vecinos, el equipo de gobierno abrió la mano en este sentido la pasada semana, estableciendo tres tramos horarios al día en los que una patrulla acudirá para verificar si hay olores, una medida considerada insuficiente por afectados y el resto de partidos.