"El informe recomienda que se abandonen las viviendas, que se verifiquen los residuos que se tratan en la planta y que en el periodo estudiado, es decir, 2011, los vecinos expuestos a los vertidos han sufrido daños en su salud". Esta es una parte de las conclusiones que presentó ayer el doctor Juan Francisco Cid Montañés, encargado de realizar un informe independiente sobre el tratamiento de residuos del vertedero de Les Canyades. Este documento, junto a las quejas vecinales y los diferentes partes médicos apoyan la demanda que unas 600 personas -entre asociaciones, vecinos y particulares- presentaron el 23 de julio, hace tan solo cuatro días, ante la Conselleria de Medio Ambiente. El objeto de esta denuncia radica, según los letrados que la llevan adelante, en el incumplimiento por parte de Fomento de Construcciones y Contratas (FCC) de la licencia ambiental integrada para la explotación de la planta.

Los datos del informe del doctor Cid Montañés dejaron perplejos al medio centenar de vecinos que ayer se reunieron en el hotel Pueblo Acantilado para debatir las futuras actuaciones en relación a la demanda presentada. Según el estudio realizado por este experto, se han detectado importantes superaciones de los niveles tóxicos, tanto a nivel químico como en los olores que se desprenden de los residuos tratados. Las muestras se han tomado a lo largo de nueve meses y han determinado que existe riesgo para la salud de aquellos que se hayan visto expuestos a los residuos químicos y a los olores del vertedero.

Los abogados, Santiago Rodríguez Collell y Elisabeth Tesch, explicaron, por su parte, que existen precedentes por la vía civil de condenas sobre denuncias similares a la presentada. A partir de la apertura de este procedimiento, la Conselleria de Medio Ambiente dispone de tres meses para emitir una respuesta, en caso contrario se consideraría silencio administrativo. Los letrados subrayaron que en caso de que se imponga una sanción muy grave, esta podría acarrear el cierre de la planta, mientras que una grave obligaría a la empresa a tomar nuevas medidas para evitar los perjuicios a los vecinos.

Apoyos

La reunión convocada ayer por los vecinos recibió diversos apoyos, como por ejemplo las asociaciones de afectados por los vertederos de Xixona, Orihuela o Villena. Sin embargo, fue la presencia de dos trabajadores de la propia empresa FCC la más agradecida por los vecinos. Los empleados mostraron su respaldo a las reivindicaciones de los residentes de las zonas afectadas por el tratamiento de residuos del vertedero y aseguraron que la planta de lixiviados está paralizada desde hace más de un año.

Por su parte, el director de la planta de FCC, David Acosta, aseguró que "la instalación cumple todos los requisitos", además, subrayó, que fue la propia Conselleria de Medio Ambiente "la que encargó los últimos resultados que fueron favorables y que el propio Ayuntamiento colgó en su página web". "Las molestias han disminuido prácticamente a cero pero siempre hay un grupo de vecinos que presenta quejas, que sepamos, no hay ningún problema", declaró Acosta.

Supresión de licencias para nuevos negocios

El pleno municipal de El Campello, a propuesta del grupo Decido, aprobó ayer suprimir las licencias de establecimiento y actividad para los nuevos negocios que no superen los 300 metros. Con el rechazo de PSOE y EU, salió adelante esta iniciativa, denominada "licencia express", que pretende, según se recoge en la moción, fomentar la apertura de locales comerciales en el municipio.

A lo largo de la sesión de ayer también se aprobó por unanimidad el rechazo a los recortes en el línea 20-N que conecta la población de El Campello con el Hospital de Sant Joan, y que ha supuesto la eliminación de los títulos mobilis, con sus perceptivos descuentos.

La moción presentada por el grupo socialista que pedía la reducción del IBI del 0,70 al 0,60% para 2013 también salió adelante pero con los votos en contra de EU, que pedía una rebaja del 0,5% y la abstención de la concejal de Decido. sandra ivorra