La Guardia Civil ha detenido a dos hombres y una mujer por robar presuntamente material de laboratorio, incluidos ácidos sulfúrico y nítrico, de la antigua fábrica de azufre de San Vicente del Raspeig. Los agentes investigan el destino que pretendían dar a lo sustraído, pues se trata de un material costoso. No obstante, descartan que fuera a usarse para fabricar explosivos y tampoco creen que tuviera relación con el tráfico de drogas.

Los hechos ocurrieron el pasado fin de semana, cuando un vigilante jurado se percató de la presencia de unas personas que estaban cargando material de la fábrica en dos turismos y dio aviso a la Guardia Civil. Una patrulla se personó de inmediato en la factoría, junto al barrio de El Tubo y que se utiliza actualmente como almacén.

Al llegar los agentes, observaron a tres jóvenes -dos chicos y una chica- que actuaban con nerviosismo y cerraron rápidamente los maleteros. Los funcionarios procedieron a su identificación y comprobaron que habían cargado en los vehículos materiales procedentes del laboratorio de la antigua fábrica como probetas, tubos de ensayo y otros más peligrosos como ácido sulfúrico o nítrico, indicaron fuentes cercanas a la investigación.

Los tres jóvenes alegaron que habían entrado a tomar fotos y que cogieron los productos pensando que la fábrica estaba abandonada. También afirmaron que el agujero en la valla por el que accedieron al interior ya existía cuando ellos llegaron.

Curiosamente, mientras los funcionarios procedían a la identificación y arresto de estas personas, el guardia jurado reconoció otro vehículo que circulaba a pocos metros y que había sido empleado para cometer otro robo, en esta ocasión cobre de unos generadores de las mismas instalaciones. El vigilante explicó que había apuntado el número de la matrícula y que, además, el coche había sido grabado por una cámara.

Los agentes interceptaron entonces el vehículo, detuvieron a su ocupante y posteriormente arrestaron a otra persona que al parecer le acompañaba días atrás cuando se llevaron el cobre. Estos dos detenidos son vecinos de San Vicente de unos 50 años de edad, mientras que los otros tres residen en otros puntos de la provincia y carecen de antecedentes penales. Todos pasaron a disposición judicial y han quedado en libertad en espera de que les cite el juez.