Los ladrones ya no entran en los chalés sólo para llevarse electrodomésticos, joyas o dinero. Ahora parece que no tienen suficiente con los objetos típicos y se interesan por otros hasta el punto de llegar a picar las paredes para extraerlos. Son elementos como las tuberías de cobre y otros objetos de metal.

Vecinos del entorno del Rodalet han denunciado una reciente oleada de asalto de este tipo con la consecuencia de que un vecino de la parcela de Torregroses llegó a encontrarse recientemente su parcela inundada debido a que durante la noche anterior le habían robado las tuberías y, obviamente, no habían cerrado la llave del agua.

La vía pública y las nuevas urbanizaciones se han quedado insuficientes para abastecer a los ladrones de cobre, que ahora también entran en parcelas privadas con chalés para robar el cobre y otros metales.

Uno de los afectados relata que en pocos días se han registrado al menos cinco robos en el camino Font de Sala y otros en el del Santero, así como en la calle Los Almendros. En una de las fincas sustrajeron maquinaria agrícola y conducciones eléctricas.

Fuentes policiales confirman que últimamente se están registrando asaltos en chalés donde, además de llevarse los objetos habituales, los ladrones pican las paredes y se llevan tuberías, griferías y objetos de metal en general. Incluso han llegado a desmontar puertas.

Sin embargo, explican que en el entorno del Rodalet se roban más pequeños objetos como consolas de videojuegos, televisores, cámaras de fotos, pequeños equipos de música o cualquier pieza que puedan llevarse para entregar a cambio de alguna dosis de sustancias estupefacientes.

Los robos de tuberías se venían dando más en zonas como la urbanización Villamontes, en una de cuyas parcelas entraron y se llevaron piezas metálicas de la barbacoa y los baños. En todo caso, los vecinos de la partida de Torregroses reclaman que se refuerce la vigilancia en estas calles y que se solucione de una vez el problema que generan las viviendas conflictivas del Rodalet.