La Junta Mayor de Hermandades y Cofradías de San Vicente del Raspeig ha decidido adelantar este año la procesión del Miércoles Santo y celebrarla un día antes. El motivo de este cambio al martes es la organización para el día 20 de abril a las 21.30 horas de la final de la Copa del Rey de fútbol, treinta minutos antes de la hora de la procesión. Los cofrades temen que el seguimiento del partido y posterior celebración de la victoria por parte de los aficionados al fútbol pueda interferir en el desarrollo solemne del acto religioso.

Las cofradías de Nuestra Señora de los Dolores y Nuestro Padre Jesús Nazareno son la que participan en la procesión del Encuentro, que se celebra el Miércoles Santo. El cruce de la avenida de la Libertad con Ancha de Castelar acoge la reunión de las dos imágenes en este acto que se recuperó en San Vicente aproximadamente hace una década, después de que desapareciera en los años ochenta.

El presidente de la Junta de Hermandades, Ángel García Rodríguez, explica que el colectivo ha optado por el cambio porque considera que "la procesión tiene que tener su liturgia y su comportamiento". Al coincidir el partido de fútbol entre Real Madrid y F. C. Barcelona, se teme que la euforia de los seguidores de uno u otro equipo en lugares situados en el entorno de la procesión reste solemnidad.

El representante de la Junta asegura que el cambio de fecha no se debe en absoluto a que se tema que pudiera reducirse la asistencia, pues los miembros de ambas cofradías -unos sesenta en cada una de ellas- iban a participar en todo caso sacando las imágenes.

El problema, indica, es que no se podía garantizar que no hubiera molestias ante la dificultad para evitar que los seguidores de un equipo u otro expresen su euforia cuando se produzca un gol. El disparo de cohetes, el claxon de los coches y, en general, las celebraciones al acabar el partido son otros aspectos que se ha considerado que podrían repercutir en la normal celebración de la Semana Santa.

"También pensamos en retrasar la hora de la procesión, pero al final el problema sería el mismo pues tanto si gana un equipo como el otro es seguro que la gente estará en la calle celebrándolo" apunta el representante de las hermandades sanvicenteras. Los cofrades reconocen que "es normal" que se produzcan estas celebraciones pero también advierten de que "nos estropearían un acto tan solemne y sentido como éste". Por lo tanto, señala, "entre todos decidimos pasarlo al martes este año como algo excepcional" y se celebrará a la misma hora, las diez de la noche.

El programa de Semana Santa comenzará el próximo domingo, con el pregón; y continuará el 17 con la procesión del Domingo de Ramos, el día 19 con la del Encuentro y el 21 con la del Silencio. El Viernes Santo incluye el Via Crucis a las ocho de la mañana y por la noche la del Entierro. La programación concluye el domingo 23 con la procesión del Cristo Resucitado.

La participación en las cofradías aumenta este año al haber reducido las cuotas

La Junta de Hermandades ha continuado trabajando durante el último año para constituirse en Federación de Hermandades y Cofradías. Ángel García explica que ya han elaborado los estatutos y ahora permanecen a la espera de que les adjudiquen el Número de Identificación Fiscal. El presidente de la Junta señala que el hecho de constituir una federación les permitirá participar en iniciativas junto a federaciones de otras localidades.

La nueva entidad estará integrada por la cinco cofradías que existen en San Vicente: el Santísimo Cristo del Perdón, Nuestro Padre Jesús Nazareno y la Virgen de la Soledad, la Virgen de los Dolores, el Santo Sepulcro y, la última en constituirse, la Inmaculada Concepción de María.

El presidente de la Junta apunta que este año ha aumentado la participación de cofrades y colaboradores aproximadamente un cuatro por ciento y que ya son aproximadamente medio millar.

La razón del incremento, apunta Ángel García, es que las cofradías se han adaptado a la crisis bajando sus cuotas con el fin de dar facilidades. "Creo que en la que más se paga son unos cincuenta euros al año", apunta el portavoz de las hermandades, quien indica que incluso en la propia Junta también se ha intentado reducir las aportaciones con el fin de "motivar a la gente" para que participe.