Un día antes de que el pleno del Ayuntamiento de Sant Joan apruebe provisionalmente el informe preliminar del futuro Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) las críticas continúan tanto por el contenido de la nueva ordenación como por el fondo de la tramitación.

Así los vecinos de Salafranca, que han presentado unas 300 alegaciones en la última exposición pública en su mayoría contra la ampliación de la autovía, mantienen otra lucha contra lo que consideran un "atropello": la desaparición de una zona verde destinada a parque infantil de juegos que pasará a ser suelo residencial múltiple, lo que la convierte en una parcela de propiedad pública activa disponible para que se edifique o se venda. "Se trata de una parcela de 1.672 metros cuadrados cedida, en su día para uso y disfrute de Salafranca que es la única oportunidad que tiene esta barriada de Sant Joan de contar con una zona verde de juegos", asegura la presidenta de la Asociación de Vecinos, María Dolores Ballester.

Ayer mismo, el Bloc de Sant Joan calificó como falta de transparencia y atentado conta la participación ciudadana que el pleno que aborda la aprobación del PGOU se celebre a las 8.30 horas de la mañana y que los miles de folios que conforman la documentación de la ordenación se entregasen a los grupos ayer cuando no haya tiempo material para revisarlos. Además, Según Xavier Sala, concejal del Bloc Nacionalista Valencià, denunció que las más de 1.600 alegaciones recogidas en las tres exposiciones del Plan no han sido respondidas y no se ha avisado a los autores para que, al menos, puedan asistir al pleno y escuchar la respuesta. Según el Bloc "una vez más el PSOE, con prepotencia se ríe de la ciudadanía".