Agost culminó anoche un fin de semana mágico donde los desfiles y el ambiente festero fueron los protagonistas indiscutibles de la jornada. A las ocho comenzó la Entrada Mora donde las comparsas - moros negres, moros viejos, moros nuevos, vizcaínos, contrabandistes y bárbaros- desfilaron ante un público muy entregado. La exuberancia de los trajes y la solemnidad del desfile dejaron boquiabiertos a turistas procedentes de todas partes del mundo. Al finalizar la marcha, la Embajada Cristiana puso la nota de color al desfile y cerró la noche con la escenificación por parte de este bando de la recuperación del Castillo al reino musulmán. La misa dará hoy el pistoletazo de salida a una jornada dedicada casi en exclusiva a actos religiosos. A las nueve está previsto la procesión donde autoridades, reinas, clero, bandas de música y fieles acompañarán al Santo Patrón portado por la comparsa Moros Nous. Al finalizar la misa y como acto distintivo de las fiestas, tendrá lugar la Embajada Humorística en la que se hace en tono irónico una crítica a personajes de la vida pública. Las fiestas concluyen con el castillo de fuegos artificiales que pondrá punto y final a una semana intensa en las que la unión del pueblo ha sido la nota significativa de las fiestas.