Después de otra noche de intensos olores procedentes del vertedero, un grupo de vecinos irrumpió ayer en el pleno del Ayuntamiento de El Campello portando una pancarta para protestar por la falta de solución a este problema que arrastran desde hace un año y medio y que ahora, con el inicio del verano, se ha agudizado. "Urbanización Cala D'Or. Paraíso del mal olor" fue el lema que esgrimieron ante la Corporación.

El pleno había sido convocado para aprobar una rebaja de sueldos que fue retirada por el propio equipo de Gobierno, del PP, para corregir la propuesta. El portavoz del grupo socialista, José Varó, protestó porque es el segundo pleno que se convoca con un único punto del día y se retira sin llegar a debatir ni votar.

Lo que sí hubo fue un turno de preguntas, que aprovecharon todos los grupos de oposición para abordar otras cuestiones pero, sobre todo, la del vertedero. El portavoz del PSOE reclamó al alcalde que exija "una acción bien directa" al conseller de Medio Ambiente, Juan Cotino, dado que el Consell amplió el plazo otorgado a la planta para solucionar el problema de los olores. Al alcalde, Juan Ramón Varó, le reprochó que "sea el último en enterarse" de problemas como el de anteanoche y reclamó la convocatoria de la comisión de seguimiento.

El primer edil lamentó la situación pero indicó que "el Ayuntamiento sólo puede tomar medidas dentro de su competencia" aunque apuntó que "si hay alguna decisión que podamos adoptar dentro de la legalidad, no le quede alguna duda de que lo haremos". La comisión no la reunirá "hasta que tengamos todos los informes".

La concejal de Medio Ambiente, Elisabeth Basto, explicó que los fuertes olores de anteanoche se debieron a que la empresa tuvo que realizar un volteo, aunque agregó que es algo que se está evitando hacer. Aseguró que "la respuesta -de la empresa- no nos deja satisfechos porque nuestro reto es llegar a un mínimo de olor, porque cero es imposible". En todo caso, la edil consideró que las medidas que se están adoptando dan algún resultado pues "estamos a primeros de julio de 2010 y no es igual que en julio de 2009". Los grupos de oposición lamentaron entonces que no se aspire a la total desaparición del olor y Basto replicó que decir eso sería engañar a los ciudadanos.

Desde el comienzo de la sesión había entre el público algunos afectados por el hedor del vertedero con camisetas que llevaban lemas como "la naturaleza da vida, el vertedero nos la quita". Pero a mitad de debate un grupo más numeroso irrumpió en el salón con la pancarta. El debate prosiguió durante unos diez minutos y los vecinos fueron adelantándose entre el público, invitando a la oposición a ponerse de pie en señal de apoyo. Los regidores lo hicieron y, cuando al cabo de un tiempo el alcalde ordenó a la Policía Local que desalojara, hubo voces de protesta como "nos has arruinado la vida y lo pagarás" o "con todos los respetos, es imposible vivir así".

El debate continuó con la intervención de Antonio Calvo, del Bloc, quien pidió el cierre del vertedero y reprochó al PP que permitiera su construcción. También Erundina Gutiérrez, de EU, reclamó al alcalde más soluciones que la carta enviada anteayer al Consell.