La junta de gobierno local aprobaba ayer el expediente de contratación de las obras de urbanización de la prolongación de la calle Sagrat, con un presupuesto de poco más de 100.000 euros y un plazo de ejecución de aproximadamente dos meses.

La actuación termina con un problema endémico que se arrastra de 20 años atrás, según explicó ayer la alcaldesa, Luisa Pastor, "porque se acaba con esta calle en fondo de saco". Con ésta, continuó, son nueve las ejecuciones realizadas en este sentido y con las mismas características, lo que redunda en, explicó la primera edil, "una clara mejora de la accesibilidad que se ha conseguido en la mayoría de los barrios del municipio que estaban afectados", lo mismo que, estéticamente, añadió, "se ha completado el trazado urbano previsto en el Plan General.

Rafael Lillo, concejal de Urbanismo, explicaba además que por otra parte "se consigue abrir al tráfico rodado un tramo de la calle que pasa de contar con un estrecho paso de poco más de un metro a un viario de más de ocho metros de anchura y que contará con doble sentido de circulación, calzada aceras y aparcamientos".