Empezó en un programa que daba oportunidad a cantantes y ahora es usted el qué elige quién merece ganar La Voz. ¿Se ve reflejado en ellos?
La verdad es que para mí ha sido muy difícil el papel de coach porque sé perfectamente lo que se siente al subirse al escenario con una única oportunidad y con tan breve tiempo para poder demostrar todo tu talento. Los nervios juegan muy malas pasadas y hay muchos sentimientos en juego.
¿Qué diría a las personas que critican este tipo de programas de televisión?
La gente tiene todo el derecho del mundo a opinar libremente sobre los concursos musicales y el hecho de que ganes uno de estos shows no te garantiza una carrera de por vida. Te garantiza el premio pero para mantener y hacer crecer una carrera hay que trabajar con mucha disciplina y en equipo. Creo que antes de criticar se debería pensar en esto.
