Lo que me faltaba por ver, un dúo cómico con la ceguera en el punto de mira

Iván, invidente, y Rafa han conseguido dar forma a un proyecto en redes sociales que cuenta con casi medio millón de seguidores entre todas sus plataformas

Preparan una gira por España con el objetivo principal "de hacer reír a la gente más que concienciar, aunque lo segundo pueda derivarse de nuestra comedia"

Rafa e Iván, componentes del proyecto humorístico Lo que me faltaba por ver

Rafa e Iván, componentes del proyecto humorístico Lo que me faltaba por ver / rafa arjones

Dos alicantinos triunfan en redes sociales con una comedia basada en la ceguera. Iván y Rafa son dos jóvenes de Los Ángeles y el antiguo barrio Jose Antonio, respectivamente, que han llevado su comedia a todos los lugares del país gracias al alcance proporcionado por Instagram y TikTok pese a que, aseguran, "no entendemos de estas cosas y tenemos amigos que nos ayudan a poder tener nuestras redes a la última". Lo que me faltaba por ver es un dúo humorístico formado por una persona invidente (Iván) y otra que, a pesar de poder ver (Rafa), acaba sucumbiendo ante la comedia que practica el primero sobre su condición.

Suman casi medio millón de seguidores entre todas sus plataformas, son reconocidos allá por donde van y sirven una dosis de comedia ácida que tiene su foco principal en la ceguera. Su gran fuerte en redes sociales consiste en responder, con tono irónico y lleno de humor, las preguntas de sus seguidores hacia algo de lo que hay mucho desinformación como puede ser la vida de los ciegos. "Hay veces que la gente te hace preguntas serias sobre algo que no logra saber, pese a que pueden llegar a ser tonterías como que te pregunten cómo abres la puerta de tu casa", asegura Rafa. Otras veces, las cuestiones tienen otra intención: "Que la gente te pregunte abiertamente también hace que te lleguen otro tipo de preguntas más hirientes de la talla de '¿cómo es que estás vivo?', aunque lejos de herir, hace que consigamos hacer más humor con ello", asume Iván.

Estos dos alicantinos, además de estar presentes en las redes sociales, también hacen un podcast y eventos en directo. En estas ocasiones, suelen venir acompañados por una tercera persona, también ciega, como es José Luis, "el que menos se deja ver". Sin embargo, la popularidad del proyecto ha hecho que el tercero en cuestión prefiera manterse apartado del ámbito público y solo haga acto de presencia en los programas de podcast: "Es un miembro más de Lo que me faltaba por ver, pero José Luis no quiere estar tan expuesto en las redes sociales como nosotros. Al final, él tiene muchos proyectos y no quiere que la gente vaya parándole por la calle cada dos por tres, como nos pasa a nosotros constantemente", añade Rafa.

Perfil

Sabiendo todo esto, queda por saber una cosa. ¿Quiénes eran Iván y Rafa lejos de este foco de comediantes? Iván, totalmente alejado del mundo del humor, trabajaba en labores de administrativo cuando, a los 22 años, perdió la vista. "En ese momento pasé a enfocarme al mundo del deporte, donde estuve durante siete años en el mundo del fútbol profesionalmente". El éxito cosechado a nivel deportivo se truncó cuando, después de los Juegos Olímpicos de Tokio en los que participó, una importante lesión le hizo apartarse del fútbol y comenzó a trabajar en la Once.

Iván y Rafa, de Lo que me faltaba por ver, en una sesión de fotos en el diario INFORMACIÓN

Iván y Rafa, de Lo que me faltaba por ver, en una sesión de fotos en el diario INFORMACIÓN / rafa arjones

Rafa, por su parte, también era futbolista y actualmente trabaja en la administración de un taller de coches alicantino. Pese a que él tampoco estaba familiarizado con el mundo de la comedia, encuentra en proyectos como el de Faemino y Cansado un símil a lo que hacen ellos en redes sociales, con dos personajes muy marcados y un humor basado en el diálogo continuado entre los dos.

Ahora, ambos compatibilizan el trabajo con los vídeos, indicando que no quieren, al menos de momento, saltar al vacío y centrarse únicamente en el proyecto humorístico. "El mundo de las redes sociales es muy volátil. Un día estás en la cúspide y otro día no te ve nadie. Dejar nuestros trabajos fijos para centrarnos en el proyecto es algo que de momento no tenemos en mente porque sería un poco suicida por nuestra parte", advierten.

Sin sentimientos

Hacen humor con conciencia, pero no conciencian con humor. Durante todo este tiempo, los componentes de Lo que me faltaba por ver han intentado mostrar que su intención principal no es una labor de conciencia social, pero que esta puede venir derivada de su comedia: "Mi objetivo no es concienciar a nadie. Si consigo hacerlo con mi humor, entonces genial, pero nuestro objetivo no es dar charlas sentimentales", comunica Iván. Después de haber dado charlas en colegios e incluso en espacios como el Corte Inglés, asumen que sienten que lo que a ellos les llena es hacer reír.

Rafa, por su parte, indica que su perfil es muy "bruto", rozando muchas veces el humor negro, como para ponerse a hablar en boca de todos los colectivos de personas ciegas. Incluso advierten que han recibido mensajes de personas ciegas (y también de gente sin problemas de visión) que les han mostrado su descontento con algunos chistes. "Al final, este tipo de humor no es válido para todo el mundo y, mientras algunas personas nos pueden escribir para decirnos que le hemos ayudado a pasar una enfermedad gracias a nuestro humor, hay gente que no entiende cómo poder hacer chistes relativos a la ceguera", explica Rafa.

Entendiendo esto, el siguiente nivel que buscan en su proyecto es saltar a los escenarios de diferentes puntos del país. Tras haber actuado en muchas ocasiones en la provincia de Alicante, en varios escenarios como la Euterpe de Sant Joan o El Búnker, para 2024 están preparando un directo totalmente renovado y más profesionalizado para pisar los escenarios de ciudades como Madrid o Barcelona donde, aseguran, actualmente se encuentra su núcleo fuerte de seguidores. "Nos da vértigo, no te vamos a mentir. Venimos de dos barrios de la ciudad y ahora estamos cerrando actuaciones en grandes ciudades. Salir de tu zona de confort es difícil porque no sabes cuál va a ser la aceptación del público o si te van a conocer, pero es un paso necesario para consolidar el proyecto de Lo que me faltaba por ver".